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Desde el pasado 1 de julio las farmacias de Castilla-La mancha pueden dispensar medicamentos con recetas expedidas en otras Comunidades Autónomas. De esta forma la región se acoge totalmente al programa de interoperabilidad creado por el Ministerio de sanidad y que ya coordina a las oficinas de farmacia de ocho regiones, permitiendo dispensar medicamentos fuera de la autonomía de origen de la receta.

Hasta ahora los castellano-manchegos podían retirar sus medicamentos en las farmacias de otras ocho comunidades acogidas a este programa, como Canarias, Extremadura, Aragón, Comunidad Valenciana, La Rioja, Castilla y Leon, Galicia y Navarra, pero los visitantes de estas Autonomías no podían hacer lo mismo en las oficinas de la región. Esto ha cambiado desde el 1 de julio.

“El Consejo de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Castilla-La Mancha (COFCAM) ha trabajado duro junto con la Administración regional para que las oficinas de farmacia de todo nuestro territorio estén preparadas y a disposición de los pacientes que vienen a veranear a la región y puedan adquirir sus medicamentos sin problemas”, explica Ignacio Romeo, presidente del COFCAM.

El objetivo de este programa es que los ciudadanos españoles puedan desplazarse libremente por todo el territorio nacional sin que su medicación, prescrita en una Comunidad Autónoma concreta, se convierta en una traba, al no poder ser dispensada en otra región. Para desarrollarlo ha sido necesaria la colaboración del SESCAM y del Ministerio de Sanidad y los Colegios Oficiales de Farmacéuticos de la región.

“Y el sistema comenzó bastante bien, porque en los tres primeros días, hasta el lunes 3 de julio, ya se habían dispensado más de 200 recetas de varias autonomías distintas”, añade Ignacio Romeo.

Gracias a la interoperabilidad los ciudadanos de la región tienen a su disposición, además de las 1.265 farmacias que ejercen en Castilla-La Mancha, las de otras ocho Autonomías, un hecho muy práctico a las puertas de las vacaciones estivales, cuando la movilidad geográfica de los españoles aumenta notablemente. En 2017, el 89% de las recetas que se emiten en la región se hacen en formato electrónico, lo que supone más de tres millones de recetas al mes.